La ansiedad en niños es un motivo frecuente en el consultorio, aunque no todos los padres descubren que sus hijos atraviesan por este problema, lo cierto es que los pequeños pueden vivir situaciones emocionales intensas que no saben cómo manejar.
Piensa por un segundo en que tu hijo experimenta por primera vez una gran cantidad de situaciones y en algunos casos el miedo puede ser inevitable, además, el mundo de los adultos suele ser incomprensible e inseguro.
En los niños la ansiedad forma parte de una respuesta adaptativa positiva, pero cuando no es controlada como es debido puede generar un problema en su desarrollo y convertirse en parte de su personalidad, que es la situación menos favorable.
A continuación te explicamos cómo puedes ayudar a un niño con ansiedad y que es lo que debes evitar hacer cuando se presenta una crisis:
En primer lugar, debes saber si en verdad es ansiedad
Sin importar la edad de la persona, es difícil detectar la ansiedad porque sus síntomas físicos son muy parecidos a enfermedades comunes. Sin contar que los niños no tienen mucha experiencia explicando qué sienten y en la mayoría de ocasiones no lo mencionan.
Es por esto que el primer paso que debes dar para ayudar a tu hijo es confirmar que tiene ansiedad. Para ello puedes pedirle que te diga cuando presente alguna de estas conductas o síntomas:
- Dolor sin razón explicable puede ser en la cabeza, estómago o reacciones alérgicas cutáneas.
- Irritabilidad y enojo recurrente.
- Dificultades para dormir.
- Cansancio.
- Sueño excesivo.
- Sensación de miedo sin motivo alguno.
- Pérdida del apetito o ganas de comer en exceso.
- Poca tolerancia al fracaso o a no obtener lo que quiere.
La ansiedad en niños también suelen mostrarse como resistencia a realizar ciertas actividades, por ejemplo ir a la escuela, compartir con sus amigos, visitar familiares e incluso a jugar solos por su cuenta.
¿Como ayudar a un niño con ansiedad?
Los padres y familiares cercanos de un niño con ansiedad son su principal fuente de apoyo y seguridad. Así que es necesario que en la casa se establezcan algunas medidas para ayudar a tranquilizar al niño y hacerle sentir que está seguro aunque se presenten inconvenientes.
Establece rutinas
Los niños necesitan de horarios y rutinas por distintos motivos, entre ellos la disciplina y la sensación de seguridad que genera la previsibilidad del orden. Sobre todo en casa, necesitan normas y una regulación de su tiempo.
Así pues, establece rutinas de juego, estudio, descanso, alimentación y demás. Puede que al principio sea difícil seguirse a un horario, pero con el tiempo tu hijo lo agradecerá.
Desarrolla la inteligencia emocional junto con tu hijo
Muchas personas adultas no saben qué es la inteligencia emocional y cómo funciona porque esta es una de las habilidades que deben enseñarse desde una edad temprana.
Si sientes que careces de inteligencia emocional busca una forma de desarrollarla y alienta a tu hijo a que haga lo mismo.
Permítele experiencias de todo tipo
Los hijos de padres sobre protectores suelen experimentar mayor ansiedad porque sienten que dependen de sus progenitores para estar a salvo. En lugar de querer protegerlo durante todo el día, enséñale a ser independiente y a confiar en sí mismo.
Cosas que NO debes hacer si tu niño tiene ansiedad
Hay algunas actitudes y acciones que debes evitar si tu hijo tiene ansiedad, de igual manera es importante que todos los miembros de la familia sigan este ejemplo:
Evita la presión y las expectativas poco realistas
Los niños no son perfectos y lo cierto es que sus habilidades se desarrollan conforme crecen. Si lo presionas para hacer cosas en las que no está preparado, puede generar frustración y miedo a fallar la próxima vez que se encuentra en una situación semejante.
Enséñale a ser realista
Hay muchas cosas que no podemos controlar y la vida no siempre es como queremos, esto debe aprenderlo aun siendo un niño.
Es imposible asegurarle que sus compañeros de clase no se burlaran de él, que algunos días no tendrá calificaciones excelentes o que no le tomará tiempo aprender cualquier deporte.
Enséñale a aceptar las dificultades como parte de la vida y a no detenerse o asustarse cuando la situación sea distinta a como él quiere.
No lo dejes de aquello que le da miedo o ansiedad
La inocencia infantil puede llevar a los pequeños a sentir miedos que son incomprensibles para nosotros, pero en lugar de alejarlo de la situación que le preocupa, enséñale que puede superar su temor.
Algunos temas son más difíciles que otros, por ejemplo, cuando los niños descubren la muerte, pero en estos casos debes buscar la manera de hacerle entender que es un fenómeno inevitable y que en este momento su familia está a su lado.
Respeta sus sentimientos y preferencias
Invalidar los sentimientos de los niños, imposibilita el desarrollo de la inteligencia emocional, de igual forma, juzgarlo por sus gustos y preferencias, reduce su criterio personal y disponibilidad a compartir con los demás.
Los niños son personas y como tal pueden presentar diferencias significativas respecto a sus padres, por lo tanto, trata de ser tolerante.
Para tratar la ansiedad en niños es necesario que se involucre toda la familia y que cada uno de los miembros entienda que está atravesando el pequeño. Los hermanos y primos de edades similares pueden ser de gran utilidad en estos casos
